Machos… ¿Para qué?

Fásmidos.

Esos insectos tan cuquis (ya sean palo o sean hoja) cuyas poderosas y autosuficientes hembras han aprendido a vivir perfectamente sin machos.

Ellas se lo guisan y ellas se lo comen. ¿Para qué van a querer sexo si pueden recurrir a la partenogénesis?

Eso que se lo digan a mi nena, mi querida insecto hoja, que ha decidido tener babies ella solita y empezar a reproducirse, pero además por todo lo alto. A pesar de no tener ningún macho cerca, 71 huevos lleva ya puestos la señora. ¡Casi nada! Como se nota que no es ella la que los tiene que cuidar…

Mi nena pone una media de 2 huevos cada día desde hace más de un mes…

Todo empezó cuando una amiga pidió unos insectos-hoja por Internet para regalarlos en una comunión. Como no, al final fui yo la que acabé con dos ejemplares en casa, las dos hembras. Desgraciadamente, una de ellas murió este verano porque no completó correctamente una de sus mudas. Y es que sí, los fásmidos se cuelgan del techo por sus dos patas delanteras y se cambian de piel cuando se les queda pequeña. Es por ello, que los terrarios donde los críes deben tener una altura considerable (como mínimo 2-3 veces su longitud total).

Mi nena pertenece a la especie Phyllium philippinicum y se alimenta básicamente de hojas de zarzamora (Rubus ulmifolius) que recojo cerca de mi casa cuando paseo a mis perras. Me la dieron cuando medía aproximadamente escasos 1.5 cm, hace más de medio año, pero ahora ya su cuerpo mide más de 7 cm. Hace varias semanas comenzó a poner huevos y desde aquel entonces ha sido un no parar. 

¡Gracias que no confundí los huevos con las cacas!

Diferencia entre huevos (con o sin humedad) y cacas de Phyllium philippinicum

Los huevos, cuando están lo suficientemente húmedos, presentan una especie de «pinchitos» que según he leído ayudan a la dispersión de la progenie (se enganchan al pelo de animales que se los llevan a otros lugares).

Aquí os dejo aquí  el 1º de la serie de videos que pretendo realizar viendo crecer a mis nietecitas desde el huevo al estadio adulto.

En unos meses cuando, con un poco de suerte, los huevos eclosionen os relataré el importante acontecimiento con pelos y señales. No os preocupéis, os mantendré bien informados.

Por cierto, con 71 huevos y sumando, si queréis adoptar un insecto-hoja y vivís por Alicante y alrededores… ¡No dudéis en contactar conmigo!

2 respuestas a «Machos… ¿Para qué?»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.